Juegos Olímpicos de Sídney 2000: El prometedor debut de Chile ante Marruecos

El cuadro nacional derrotó 4-1 a los africanos con una brillante actuación personal de Iván Zamorano, que colaboró con tres anotaciones

El camino olímpico de La Roja en Sidney 2000 tuvo su punto de partida con el duelo ante Marruecos en la ciudad de Melbourne, Australia. Este cotejo válido por la primera jornada del Grupo B, que completaban España y Corea del Sur, era clave en las aspiraciones nacionales de pasar a la siguiente fase.

El combinado Sub 23, que logró su clasificación en el Preolímpico de Brasil, fue reforzado con las nominaciones de Iván Zamorano, Pedro Reyes y Nelson Tapia, quienes tomaron la titularidad desde un comienzo.

De esa manera, el entrenador Nelson Acosta dispuso para el debut a Tapia en portería; Cristián Alvarez, Reyes, Pablo Contreras y Rafael Olarra en defensa; Claudio Maldonado, Patricio Ormazábal, Rodrigo Núñez y David Pizarro en el medicampo; Iván Zamorano y Reinaldo Navia en el ataque.

En el arranque, a los 5 minutos, Marruecos sufrió la expulsión de Abdel Chibuki, lo que permitió mayor protagonismo chileno. Sin embargo, esto no se tradujo en mayores ocasiones de gol y La Roja abusó del envío de centros al área.

Por su parte, los africanos exhibieron su velocidad y despliegue, llegando con riesgo al arco de Tapia, a pesar del hombre menos en cancha. 

Recién a los 36’, Chile pudo desnivelar el marcador. Un centro de Pizarro en complicidad con Navia, le permitió a Zamorano con una "palomita" poner el 1-0.

La Roja creció en confianza y justo antes del descanso, Pizarro fue infraccionado dentro del área por la zaga marroquí. El juez pitó penal y Zamorano fue el encargado de aumentar la ventaja para los nacionales.

En la segunda mitad se vio la mejor versión de Chile, atacando por las bandas y aprovechando las habilitaciones de Pizarro. Así, a los 55’, un desborde por la franja derecha de Navia dejó a Zamorano en posición de remate, quien definió con sutileza a un rincón. Fue el 3-0 y la tercera cifra personal para el capitán y delantero.

A los 70’ a través de lanzamiento penal, pero esta vez con Navia como encargado del remate, Chile sentenció el compromiso con un contundente 4-0. Tras el gol, La Roja administró el balón y bajó su intensidad, lo que fue aprovechado por Marruecos para anotar un descuento a los 78’ vía Youssef Safri.

El pitazo final selló un 4-1 esperanzador para las ambiciones del elenco nacional. El siguiente compromiso sería tres días después ante España, uno de los favoritos para quedarse con el grupo.